Ejerce en el Colegio de Cienfuegos (Cuba) como inspector y profesor de escuelas elementales (1914-1918) volviendo a Oña a estudiar Teología (1918-1912).
Tras una temporal interrupción de su estudios por una grave enfermedad, pudo seguir su vocación y fue ordenado sacerdote el 05/03/1922.
Tras cuatro años más en Cuba, regresó a España consiguiendo la tercera probación en Manresa de 1922 a 1923.
El 1 de junio del mismo 1930 es consagrado en Anqing por Monseñor Huarte.
Cuando en 1946 se establecía en China la Jerarquía residencial, Anqing era promovida a Archidiócesis y Monseñor Melendro a su primer arzobispo residencial.