Por ello, la BGD se veía a sí misma como el brazo político de los alemanes expulsados.
Como partido revanchista, abogaba además por la restauración de todas las antiguas fronteras alemanas perdidas tras la Segunda Guerra Mundial, incluyendo los Sudetes y las fronteras del Imperio alemán.
Sostenía que el Tercer Reich continuaba existiendo y por lo tanto la República Federal de Alemania no era su sucesora legal.
La BGD presentó varias campañas sin éxito para la devolución de los bienes expropiados en lo que hoy es Polonia y República Checa.
[3] El 15 de julio de 2017, la BGD se fusionó con el pequeño partido Aus dem Lande stammende Deutsche, que a partir de ese momento pasó a llamarse Aus Gesamtdeutschland stammende Deutsche (AGsD).