Cuando esta terminó en derrota para los españoles, el joven teniente Félix Marcano, al igual que otros muchos dominicanos que habían luchado por España, marchó a la, por entonces, colonia española de Cuba.
Los tres hermanos Marcano, que habían participado en las conspiraciones previas a este estallido, se incorporaron de inmediato al alzamiento.
Terminada la guerra, en la cual habían perecido sus dos hermanos, el Coronel Marcano se involucró en las conspiraciones que llavarían al estallido de la Guerra Chiquita (1879-1880), continuación de la anterior.
Durante el transcurso de esta, Félix Marcano fue capturado por los españoles y guardó prisión en Chafarinas.
Iniciada la tercera guerra por la independencia de Cuba, la Guerra Necesaria (1895-1898), el Coronel Marcano es hecho prisionero por los españoles y deportado a su país de origen.