Por motivos familiares se traslada desde muy joven a Cincinnati, dónde, según William Dettloff (biógrafo de Ezzard) Este contexto hizo que comenzara su carrera como boxeador aficionado, hasta llegar a obtener en 1939 el título nacional aficionado del peso medio (torneo Guantes de Oro de Chicago).
[4] En teoría, este combate era también para dilucidar el nuevo campeón del mundo, título vacante por la retirada de Joe Louis (The Brown Bomber, como era conocido), pero la comisión de Nueva York no lo reconoce.
[6][7] En este combate consigue, además, la hazaña de ser el único en completar los quince asaltos contra Louis y ganarle.
[11] Con posterioridad intentó dos veces más el asalto al título, pero perdió rotundamente en ambas frente a Rocky Marciano.
Entre los asistentes, había varios personajes del mundo del boxeo y algunos boxeadores, entre los que cabe destacar a Archie Moore y Rocky Marciano, quienes se sentaron en la mesa principal, junto a Ezzard que, ya en ese momento, estaba postrado en una silla de ruedas.
[16] Con el transcurso del tiempo, perdió la capacidad para hablar, comunicándose mediante parpadeos y pasó a depender de terceras personas para sus necesidades más básicas.