Estatua del perro Tago

La estatua del perro Tago es una estatua de terracota situada en el Palacio de Accursio en Bolonia.Allí estuvo durante más de doscientos años, expuesta a la curiosidad de los boloñeses tanto como al mal tiempo.Una cuidadosa restauración en 2008 permitió recuperar los rastros del color originario (amarillo para el pelo, rojo para el collar y la almohada) y la inscripción sobre la almohada con el nombre del perro.Fue reforzada la estructura, que faltaba en la parte posterior, y vaciada de los restos que podían comprometer la solidez.[2]​ Posteriormente fue expuesto durante breve tiempo en la Gipsoteca del Museo Cívico Arqueológico, y luego encontró su lugar en las Colecciones Comunales de Arte del Palacio de Accursio.