Situada no muy lejos de la calle du Télégraphe, debe su nombre al telégrafo óptico que inventó Claude Chappe en 1794.
Dada la profundidad de la estación, (20 metros), llegar hasta ella implica descender unas tortuosas escaleras.
Los paneles publicitarios emplean un fino marco dorado con adornos en la parte superior.
Por último, los asientos de la estación son los modernos Coquille o Smiley, unos asientos en forma de cuenco inclinado para que parte del mismo pueda usarse como respaldo y que poseen un hueco en la base en forma de sonrisa.
Los mismos están presentes en un único color, el amarillo.