En 1932, debido a la construcción de la Ciudad Universitaria, se reforma el trazado del tranvía.
La nueva línea es doble en todo su recorrido, curvas con mayor radio, suaves pendientes, y sin pasos a nivel.
A la salida, la línea se bifurcaba en dos ramas: una hacía el interior de la Ciudad Universitaria, que no llegó a construirse, y la otra por el campo cruzaba el arroyo de Cantarranas por el Viaducto del Aire.
La estación fue pensada para evitar todos los cruces entre personas, coches y tranvías.
El andén del lado del estadio tiene gran amplitud, y tenía acceso al estadio mediante una rampa y al lado opuesto de la actual Avenida de Martín Fierro mediante escaleras.