Esquines

Esquines representaba la facción pro-macedonia de Atenas, mientras que Demóstenes reclamaba la guerra contra Filipo.

Después de ayudar a su padre en la escuela, pasó un tiempo como actor, y sirvió en el ejército, en el que se distinguió.

Esquines tuvo éxito: Timarco fue condenado a la atimia y fue destruido políticamente, según Demóstenes.

Este comentario fue más tarde interpretado por el Pseudo Plutarco en sus Vidas de los Diez Oradores como que Timarco se había ahorcado tras abandonar la asamblea, si bien ese hecho es discutido por algunos historiadores modernos.

En el 339, siendo uno de los delegados atenienses (pylagorae) en la anfictionía, pronunció un discurso que desencadenó la cuarta guerra sagrada.

El tema siguió en discusión hasta el 330, momento en que los dos rivales pronunciaron los discursos Contra Ctesifonte y Sobre la Corona.