Esta acción causó gran escándalo, ya fue visto en directo por cerca de los mil fieles presentes en la iglesia en esos momentos y también fue televisado.
Al día siguiente la noticia apareció en los principales periódicos del mundo, y en París ocasionó un intenso debate tanto en la prensa como en los cafés.
La acción acentuó en el movimiento una ruptura entre dos bloques que podrían ser divididos respectivamente en «artístico» y «accionista», ruptura que dos años más tarde conduciría a una división explícita y la formación de la Internacional letrista.
Fue después de 1950 que los principales impulsores de esta división (Gil J. Wolman, Jean-Louis Brau y Guy Debord) se asociaron al grupo ultra-letrista accionista, y que con Ivan Chtcheglov y Serge Berna rechazarían a Isou como dirigente de la Internacional Letrista (IL).
Allez dans le désert tragique et exaltant d’une terre où Dieu est mort et brassez à nouveau cette terre de vos mains nues, de vos mains d’orgueil, de vos mains sans prière.