Ernest Lehman

En su escasa obra (apenas una docena de películas) figuran títulos tan relevantes como Sabrina (1954), Con la muerte en los talones (1959), West Side Story (1961), Sonrisas y lágrimas (1965) o ¿Quién teme a Virginia Woolf?

Su trabajo despertó el interés de la Paramount, que le ofreció un primer contrato como guionista.

Perfeccionista hasta la extenuación, Lehman llegó incluso a escalar el Monte Rushmore antes de escribir la escena fetiche del film para hacerse una idea de las sensaciones que viviría a su personaje al mirar al vacío.

En 1969 escribe Hello, Dolly!, un homenaje al cine musical dirigido por Gene Kelly y protagonizado por Barbra Streisand, tras lo cual da el salto a la dirección con Portnoy’s Complaint (1972), una adaptación de la novela homónima de Philip Roth, que supondría su primera y única experiencia como director.

«Acepto este honor», aseguró Lehman, «en homenaje a todos los guionistas de Hollywood, que tantas veces hemos sufrido el anonimato».