Erik Andreas Colban tenía el mismo nombre que su padre, Erik Andreas Colban, un general del ejército noruego.
Colban comenzó la carrera de derecho en Romsdal, donde estudió desde 1899 a 1900.
Entre otros muchos destinos como diplomático para su país, en 1942, se convirtió en embajador de Noruega en Londres, cargo que ocupó hasta 1946.
Colban también trabajó después de la guerra, para las Naciones Unidas cuando el noruego Trygve Lie era Secretario General.
Publicó en 1952 sus memorias sobre su carrera como diplomático en el libro "Cincuenta años" (Oslo: Aschehoug).