Entrada de Cristo en Jerusalén (van Dyck)

[2]​ Pintada cuando Van Dyck tenía sólo unos 18 años, la Entrada de Cristo en Jerusalén demuestra su temprano dominio del medio.

Aunque ya estaba trabajando en el desarrollo de su propio estilo, más robusto, van Dyck estaba muy influenciado por Rubens, como se puede ver en los colores vibrantes, la composición dinámica y la gran escala.

Esta exposición, que abarcaba su producción entre los 16 y los 22 años, reunía unas 90 obras de cuando residía en Amberes.

Entre ellas, 30 grandes y ambiciosas obras como La entrada de Cristo en Jerusalén.

[3]​ Esta obra en concreto, sin embargo, se consideró una de las más experimentales, ya que el joven artista buscaba aumentar el impacto visual de sus obras.