Enriqueta Martín Ortiz de la Tabla
Tuvo gran relevancia en el acceso de las mujeres a la profesión bibliotecaria.[1] Según señala María Jesús Viguera Molins en su discurso Episodios andalusíes de Extremadura.Además, llevó a cabo diversas iniciativas para incentivar el desarrollo agrario, entre las que destaca el fomento de la apicultura movilista.[4] Enriqueta Martín, al igual que María Moliner o Juana Capdevielle, accedió a puestos de responsabilidad y desarrolló su labor como bibliotecaria con libros y manuales, como por ejemplo Bibliotecas.Paralelamente, entre 1940 y 1949 ejerció como la representante semioficial del Instituto, cargo que desempeñó hasta su jubilación en 1960, aunque sin renunciar por ello a su labor como bibliotecaria.