Enric Sió i Guardiola
Junto con otros autores de su misma generación, como Josep María Beá (1942), Luis García (1946), Felipe Hernández Cava (1953), Carlos Giménez (1941), Fernando Fernández (1940) o Adolfo Usero (1941) participó en la renovación del cómic español,[1] siendo adscrito habitualmente al grupo de estilo «pictórico».[2] Hijo del director de una empresa textil, Enric estudió Economía pero su vocación le llevó a iniciar también Bellas artes.En 1974 se exilió voluntariamente en Italia por «la asfixia que le produce el grisáceo panorama social y político español».Allí conoció a autores italianos de cómic adulto, con los cuales se identificó y con los que ha sido comparado con frecuencia, tales como Guido Crepax, Hugo Pratt o Dino Battaglia.Regresó a Barcelona en 1979 donde creó una serie de cuentos cortos que se publicaron en las revistas Rambla, en Tótem y en la francesa Pilote.Tras esta experiencia abandonó la historieta para dedicarse a otras facetas creativas como la fotografía, la publicidad o el cine.Como ilustrador realizó entre otros muchos encargos la portada del disco Visca l'Amor de Gillermina Motta.El ensayista Javier Coma le incluyó entre los doce clásicos del cómic español en su obra de 1981 Y nos Fuimos a Hacer Viñetas.Se le ha comparado frecuentemente con Guido Crepax, con el que comparte estilo y aspiraciones narrativas.