Después de estudiar unos viejos artefactos encontrados en el planeta, Daniel concluye que pertenecen a los Unas.
En tanto, Teal'c encuentra el cuerpo del soldado desaparecido colocado en una estructura Unas diseñada para advertir a sus enemigos.
Debido a la importancia del Naquadah, el Pentágono desea que Edwards vuelva e inicie ya la extracción en el planeta.
El General acepta, pero advierte que si fallan las negociaciones, permitirá a Edwards utilizar la fuerza contra los Unas.
De esta forma, los Unas podrán vengar a sus antepasados, y se convertirán en aliados en la lucha contra los Goa'uld.