Elisabeth Bergner

Comenzó a actuar en Innsbruck con tan solo quince años.

En Viena, trabajó como modelo, posando para el escultor Wilhelm Lehmbruck, quien se enamoró de ella.

Contó con la colaboración de Edith Gyömrői Ludowyk para el diseño de trajes para las películas en el estudio Neumann Produktion, tradujo textos, interpretó y tomó fotografías.

Con la llegada del nazismo al poder, Bergner y su marido, Paul Czinner, ambos judíos, se trasladaron a Londres.

Volvió a Alemania en 1954, donde actuó en algunas películas y en el teatro; el distrito berlinés de Steglitz le dio su nombre a uno de sus parques.