Electric Dreams

Esta película se recrea en el apartamento de Miles (Lenny Von Dohlen) (en San Francisco, California), un hombre tímido e introvertido (posiblemente nerd), que compra un ordenador personal.

Miles tiene una nueva vecina llamada Madelaine (Virginia Madsen) que toca en una sinfónica y en sus tardes libres practica violonchelo.

A la vez, se muda la nueva vecina de Miles, Madeline Robisat, quién toca el cello.

Madeline disfrutó tal música generada por computadora y creyó que Miles la hizo.

Miles y Madeline se encuentran en el supermercado, esta última habla sobre la música que escuchó hace rato.

Al llegar a casa, Miles prueba si es que los aparatos aún funcionan, y dice notas musicales en el micrófono para ver si la computadora lo repite.

Un perro al escuchar tal ladrido, entró a la casa por la puerta abierta, pero la computadora lo ahuyenta.

Miles, pensando que un perro entró, sacó su bate, pero justo llegó Madeline y tapó la computadora.

Mientras hablaba con Madeline, este trataba de ocultar la computadora, y ella le da una invitación para un concierto sinfónico.

La audiencia no lo soportó y Miles fue echado mientras fue al baño para tirar ese parlante.

Durante la noche, la computadora le habla a Miles, y este se sorprende.

La computadora no sabe lo que es el amor, y Miles le explica, dándole una idea.

Al día siguiente sale y va a la tienda para hablar sobre el comportamiento de la computadora.

Miles se encuentra con Madeline y le dice que todo el tiempo ha estado mintiendo, pero ella la perdona.