Elecciones presidenciales de Timor Oriental de 2002

Ese mismo día, la Asamblea Constituyente se convirtió en el Parlamento Nacional y Gusmão asumió como presidente de la República.

Las tropas desembarcaron en la capital, Dili, y el Fretilin inició una guerra de guerrillas contra los ocupantes.

El Fretilin, liderado por Mari Alkatiri, se reconstituyó como partido político y se impuso por abrumador margen, logrando un 57,37% de los votos válidos y una mayoría absoluta al obtener 55 de los 88 escaños disponibles.

[16]​ Aunque fracasó en asegurarse los dos tercios requeridos para impulsar unilateralmente un texto constitucional, su mayoría facilitó la formación un gabinete ministerial de transición con Alkatiri como «Ministro Principal».

[16]​ Durante la redacción de la primera constitución del nuevo estado, el Fretilin se apoyó en una alianza la Asociación Social Demócrata Timorense, fundada por Amaral luego de haber sido expulsado por el ala radical del Fretilin y reestablecida tras su retorno al país en el año 2000, para lograr los dos tercios requeridos y dominar el proceso constituyente.

[19]​ Para ser elegido presidente se requeriría obtener, al menos, un 50% + 1 de los votos en primera vuelta.

[19]​ En caso de que ningún candidato alcanzara esta cantidad, se realizaría una segunda vuelta entre los dos candidatos más votados un mes después de la primera, en la que el más votado resultaría electo.

Gusmão (encarcelado por el gobierno indonesio y condenado a prisión perpetua en 1993 hasta su liberación durante la crisis de 1999)[21]​ había renunciado a su afiliación del Fretilin para ser visto como un portavoz no partidista de la resistencia timorense, y poco a poco se había distanciado cada vez más de su antiguo partido.

[1]​ El Fretilin no apoyó la candidatura de Gusmão, pero no se pronunció en contra y tampoco anunció una candidatura alternativa a la suya, lo que se tomó como un desentendimiento del proceso electoral presidencial.

Si bien el Fretilin declaró que daría un cierto respaldo a Gusmão si se presentara como independiente, rechazó darle un apoyo formal.

Alkatiri acusó a Gusmão de haber apoyado al PD y al PSD en las elecciones parlamentarias, aunque aclaró que «no había ocurrido una ruptura» entre el partido mayoritario y el dirigente independentista.

[22]​ Del mismo modo, Alkatiri declaró que el Fretilin consideraba que Gusmão solo obtendría el respaldo suficiente como «candidato de consenso» si el Fretilin no intervenía en su campaña, siendo este aparentemente el motivo formal por el cual el partido decidió no darle su apoyo.

[24]​ No obstante, se le consideraba una figura relativamente controvertida por haber intentado negociar con Indonesia durante su largo exilio en Yakarta.

[8]​ Mientras crecía el apoyo a una candidatura de consenso en nombre de Gusmão, Amaral reconoció el apoyo popular de este último, pero se opuso públicamente a que la primera elección presidencial en la historia timorense fuera ganada sin oposición, y declaró que la ASDT no reconocería un presidente que no hubiese sido ratificado por el pueblo en una elección disputada.

Ante la perspectiva de una elección incontestada con Gusmão como único candidato, Amaral aceptó finalmente la nominación.

[25]​ Recorrió la mayor parte del territorio del país dando discursos en los cuales convocó a los timorenses a «exigir pacíficamente una vida mejor», y declaró una y otra vez que no tenía la intención de liderar el país.

[26]​ Mientras se levantaban más dudas sobe un quiebre entre Gusmão y Alkatiri, el candidato presidencial comenzó a girar su discurso a una retórica confrontativa con el gobierno del Fretilin, criticando su decisión de mimetizar los símbolos nacionales con los partidarios, así como su control casi absoluto sobre las instituciones entrantes, comprometiéndose a ejercer como un árbitro protector que «expresaría la desesperación del pueblo», cuando hiciera falta.

[29]​ Conforme la campaña avanzaba, la creciente animosidad entre Gusmão y el Fretilin se hizo mucho más notoria.

[6]​ El presidente de la Asamblea Constituyente, Francisco Guterres, hizo bromas ante los medios afirmando que su mayor prioridad el 14 de abril sería pasar el día en la playa,[25]​ mientras que Alkatiri declaró que al recibir el apoyo de nueve partidos políticos, Gusmão había cometido «un grave error» porque ya no podía ser considerado un líder nacional apartidista.

[30]​ Durante el debate, Amaral declaró públicamente que «si hubiera un solo candidato, no habría elección» al ser consultado sobre sus motivaciones para postularse.

[7]​ Estos resultados se atribuyeron a la alta popularidad de Amaral en dicha región, así como la escasa información que llegó a varias áreas rurales y las dificultades para los partidos que respaldaban a Gusmão (en gran medida minoritarios y dependientes del alcance personal del propio candidato) para hacer campaña allí.

Palacio Presidencial Nicolau Lobato, Dili .
Xanana Gusmão fue visto como amplio favorito desde un principio.
Amaral aceptó presentarse con el propósito de evitar un triunfo sin oposición de Gusmão.