Fue la última película en la que intervino la legendaria actriz Dolores Dardés, abuela de Luisa y Paquita Vehil.
Esta última forma de práctica estaba representada por el personaje del viejo doctor encarnada por Enrique Muiño en tanto la primera lo era por su hijo, médico joven con menos escrúpulos actuado por Ángel Magaña.
Participaron del filme los siguientes intérpretes:[1] En opinión del crítico Calki en su nota publicada en el diario El Mundo: El diario La Nación opinó que la película "desde un punto de vista social...Presta un eficaz servicio a la profesión médica del país"[1] y Manrupe y Portela señalan que el filme "echa una mirada crítica a los hospitales y la medicina como profesión en una de sus comedias de marco familiar con observaciones todavía valederas.
"[1] El crítico Domingo Di Núbila escribió a propósito del filme que "esta digna película aunque no totalmente lograda, fue un ejemplo de cine no comprometido con intereses que esconden bajo seductoras fachadas sus maniobras inescrupulosas, cuando no delictivas.
Su denuncia fue oportuna, no oportunista, y contribuyó a hacerlo perdurable porque esa clase de negocios continúa bajo formas sofisticadas y despliegues tecnológicos"[3]