El tiempo es el que es

Al entrar temerariamente en el edificio, ve a tres personas vestidas con ropajes de otra época.

Tras ser hospitalizado, es suspendido en su empleo debido a sus tendencias suicidas, ocasionadas por el trauma sufrido por la muerte de su esposa.

Los viajes se hacen a través de puertas que conducen al pasado, como el subsecretario le demuestra personalmente.

Cuando un paisano acude en su ayuda, la trifulca es zanjada por el viajero en el tiempo, que es un alto oficial francés llamado Thibaut.

No obstante, la propia Amelia le sugiere que telefonee a su esposa para despedirse cordialmente de ella.

Rodolfo Sancho interpreta a Julián Martínez, un enfermero madrileño del SAMUR deprimido por la muerte accidental de su esposa.

Aura Garrido es Amelia Folch, una joven universitaria barcelonesa de finales del siglo XIX, con ideas muy avanzadas para su época.

Perteneciente a una familia acomodada, su educación, memoria e inteligencia la hacen apta para dirigir la patrulla.

Sus principios son los propios de su época, por lo que no le gusta ser dirigido por una mujer, pero es honorable y patriota.

Cayetana Guillén Cuervo es Irene Larra, responsable de recursos humanos y logística.

Juan Gea tiene el rol de Ernesto Jiménez, un funcionario serio y riguroso cuyo origen es desconocido.

Junto a los anteriores, que constituyen el equipo protagonista de la serie, aparecen otros personajes en el episodio.

Julián Villagrán da cuerpo a un curioso Diego Velázquez, que trabaja para el ministerio confeccionando retratos robot.

[2]​[3]​ Iván Villanueva, Susana Córdoba, Ismael Fritschi, Luis Hostalot, Patricia Delgado, José Ramón Iglesias, Joan Llaneras, Paco Hidalgo, Sergio Torrico, Ángel Jodrá, Nacho San José y Nacho Marraco.

El propósito era realizar guiones de ficción utilizando personajes históricos, por lo que en este primer capítulo se recurrió a Juan Martín Díez, más conocido como El Empecinado.

Vigil deseaba que El Ministerio del Tiempo tuviera una factura muy cinematográfica, dotando a cada capítulo de una planificación y tono diferentes.

Otra creación no real es la llamativa escalera helicoidal por la que se accede a las puertas del tiempo.

Por el contrario, en la cafetería los agentes mantienen conversaciones informales y contactan con otros funcionarios adquiriendo información por cauces extraoficiales.

En la misma calle se encuentra el bar Benteneo, donde acude Julián a rememorar la cita que tuvo con su entonces novia.

Cuando el subsecretario encarga a la nueva patrulla su primera misión, Amelia pregunta cuál es el plan.

Alonso, como personaje más antiguo recién llegado al siglo XXI, es objeto de bromas relacionadas con los choques culturales.

TVE eligió esa fecha para evitar competir con la popular serie Velvet, emitida por Antena 3.

[24]​ Un estudio realizado sobre los mensajes enviados en Twitter acerca del episodio muestra una mayoritaria satisfacción entre los participantes.

Esto no solo dificultaba la producción, sino también la venta del producto a otros países, obligando incluso a remontar los episodios para ajustarlos al horario estelar de esos países, más reducido que el español.

Casi todos parecen utilizar un español estándar propio de la España del siglo XXI.

Los viajeros del tiempo visitaron la Casa del Libro .
El subsecretario y Julián visitan la "trastienda" de Las meninas .