El puente (obra de Guillermo Silveira)

El puente es uno de los primeros paisajes urbanos conocidos del pintor y escultor español Guillermo Silveira (1922-1987).

Está pintado al óleo sobre tela de saco y pertenece en la actualidad a una de las hijas del artista.

Respecto al lugar exacto que aparece representado en el mismo no cabe la menor duda de que se trata del famoso Puente de Isabel II, más conocido como «Puente de Triana» de Sevilla, donde el incipiente artista residió básicamente desde su ingreso voluntario en el Ejército del Aire el 29 de diciembre de 1939 hasta su traslado a Salamanca en febrero de 1943,[1]​ si bien el hecho de que el cuadro fuese realizado de memoria (algo extremadamente habitual en el conjunto de su amplia producción paisajística) hace que se aprecien entre este y la construcción real no pocas desemejanza.

[11]​[5]​ Artísticamente el estudio de la pieza descubre un profundo conocimiento de pintores como «Georges Rouault, Matisse, Van Gogh, Utrillo, Cézanne o, entre los nacionales, Vázquez Díaz, Palencia, Cossío, Ortega Muñoz y otros».

[3]​ Cromáticamente predominan los colores terrosos, grisáceos o sienas contrapuestos a una serie de tonos complementarios (rojizos, amarillentos, verdosos), así como un empleo abundante de materia pictórica, propios de esta primera fase del autor.