El rostro tiene dos cuernos que se elevan sobre la frente; la nariz puntiaguda, la boca, semiabierta, deja al descubierto dos colmillos.
[1] Fue esculpida entre 1985 y 1987, por César Octaviano Cristóbal Buenaño Núñez, tractorista empleado del Ministerio de Obras Públicas.
Comentaba durante la construcción a sus amigos que "al esculpir la figura que representaba al demonio, él dejaría en paz a los conductores", haciendo referencia a los accidentes que se dan por la curvas pronunciadas del carretero de la zona y por los abismos circundantes.
También decía que "si la Virgen y los santos tienen sus esculturas, por qué no puede el diablo tener la suya", haciendo referencia a un pequeño santuario católico ubicado a 10 km de distancia.
Algunas veces circulan relatos en torno a las motivaciones del escultor o su significado, relacionados con su supuesta inspiración satánica, aunque son historias más apegadas al rumor y la leyenda que a un relato verificable.
[3] Está ubicado en una zona geográfica límite entre la Región Litoral o Costa y la Región Interandina o Sierra, transitoria entre climas, vegetaciones y culturas distintas, al atardedecer se ve cubierta en neblina todos los días, los precipicios son violentos.