La pintura muestra la escena del Pecado original cometido por la primera pareja humana: Adán y Eva.
Colocó a Adán en el lado inferior derecho del tronco, pero su figura está sentada de espaldas al espectador, lo cual es una rareza en el arte.
Eva está sentada frente a Adán, ligeramente más arriba, del lado izquierdo superior, simbolizando el pecado.
En el fondo a la derecha hay una pequeña escena con lo sucedido posteriormente, como consecuencia del pecado cometido.
Adán y Eva son castigados con la expulsión del Paraíso, perseguidos por un ángel radiante con una espada de fuego.