Finalmente, Elvira acabará muriendo de amor por el protagonista dejando una carta.
Durante el transcurso del juego, aparecerá otro personaje, Don Diego, hermano de doña Elvira que viene a vengarla.
Andará vagando por las calles hasta que se encuentre al espectro de una mujer cubierta con un velo.
Seguirán caminando hasta llegar a un lugar sin cielo, sin estrellas, lo que puede entenderse como el purgatorio.
Don Félix avanzará hacia el espectro que, inclinado sobre su tumba, llora.
Don Félix se dará cuenta de que en realidad él también murió en ese instante.
El aquelarre espectral también puede ser observado con una diferencia mínima en La sinfonía fantástica de Hector Berlioz en el tiempo final, donde también se reúnen gran cantidad de seres sobrenaturales y demoníacos donde se entremezclan gemidos, gritos y carcajadas.