El escriba sentado

Fue esculpida entre los años 2480 y 2350 a. C. Se realizó en una época en que Egipto se encontraba en la cima de su gloria: los artesanos cubrían más campos, las tumbas y los templos tenían una arquitectura más compleja y el arte se ocupaba de objetos más pequeños, reproduciendo la vida cotidiana.

Presenta pliegues en el vientre, denotando un ligero sobrepeso, lo que era indicación de un estatus elevado.

Su buena conservación nos permite ver la policromía antigua, con la aplicación de los diferentes colores.

Las esculturas de dioses y faraones del Imperio Antiguo se caracterizaban por mostrar una actitud hierática.

Actualmente la estatua se exhibe en el Museo del Louvre de París, Francia.

Detalle del rostro del escriba .
Detalle de las manos.