[3] Don Anselmo Proharán (José Isbert) es un anciano totalmente decidido a adquirir un cochecito de inválido con motor, igual que el que tiene su amigo Lucas y otros compañeros de su edad.
Cuando su hijo Carlos (Pedro Porcel) se entera, le obliga a devolverlo.
En venganza, Don Anselmo toma la decisión de envenenar a su familia.
La versión inicial de la película daba claramente a entender que Don Anselmo cumplía sus fúnebres propósitos, pero este final fue prohibido por la censura, optándose entonces por una versión más edulcorada en la que implícitamente se veía que el decidido anciano no ejecutaba su plan y la familia seguía viva.
[4] En una breve secuencia aparecen caracterizados de frailes el guionista Rafael Azcona y Carlos Saura.