El Lobo es una película dramática española de espionaje de 2004 dirigida por Miguel Courtois y protagonizada por Eduardo Noriega, José Coronado, Silvia Abascal y Jorge Sanz.
Narra la historia de un agente del servicio secreto español que logró infiltrarse en las filas de ETA político-militar entre 1973 y 1975, consiguiendo desestabilizar la organización gracias a su intervención.
Desde entonces, debió huir del País Vasco, viviendo oculto bajo la constante amenaza de ETA, con una nueva identidad y una nueva fisionomía lograda con operaciones estéticas.
La película da a entender que si la dictadura de Franco lo hubiese querido, ETA habría sido desarticulada por completo.
También que hay intereses ocultos por parte del Estado por la permanencia de ETA.