La asociación posee una rama belga, «Kiro et Louna – Collectif de soutien aux familles d’accueil des orphelins du Darfour» hermanada con el «Collectif des familles pour les orphelins du Darfour» (COFOD) francés.
El Arca de Zoé se ha destacado por sus agrias denuncias contra el gobierno sudanés a raíz de su papel en el conflicto, así como contra las estrategias empleadas por la ONU y otras agencias humanitarias en la zona.
El presidente chadiano Idriss Déby les acusó de ser una organización «pedófila» o «dedicada al tráfico de órganos», si bien tales acusaciones no parecieron tener fundamento.
El fundador de la organización, Eric Breteau está entre las seis personas condenadas.
Un chadiano y un sudanés, colaboradores del rapto de los niños fueron condenados a cuatro años de prisión y dos funcionarios chadianos detenidos fueron absueltos.