es una estampa japonesa del artista especializado en ukiyo-e Katsushika Hokusai.
[1] La impresión se ubica en la parada Ejiri del camino Tōkaidō, al lado oeste del puerto de Shimizu, en la actual prefectura de Shizuoka.
Estos bosques fueron un tema popular durante el período Muromachi, cuando muchos poetas los retrataron en forma de waka y haiku.
El fondo queda dominado por el monte Fuji, que se mantiene estático ante el tema en el que se centra el autor: «la insustancialidad del mundo humano frente a las poderosas fuerzas naturales».
Para aumentar la desolación del llano, así como del movimiento, la paleta de colores es limitada y el monte Fuji se levanta inmutable detrás de la escena, dibujado con una sola línea como contorno.