Hacia el este se encuentran las aldeas de Seyðisfjörður y Neskaupstaður.
Egilstaðir cuenta con un museo (Minjasafn Austurlands) que se dedica a la cultura y la naturaleza del este de Islandia.
[5] Una anterior farmacia fue convertida en un centro católico con una capilla (Corpus Christi Kapellan) en 2009.
[9] La granja Sænautasel que se halla al borde del lago fue construida de turba en 1843.
Este cañón puede visitarse desde sus dos orillas y se pueden escalar parte de sus columnas basálticas.
El edificio fue construido en 1939 por el arquitecta alemán Fritz Höger y regalado al Estado islandés en 1948.
[18] Muchos excursionistas visitan el bosque Selskógu al borde del río Eyvindará en el este de la ciudad.
[19] La comunidad Eidar que está 12 km en el norte de Egilsstaðir en la carretera núm.
[20] La llanura Hróarstunga que es muy escasamente poblada se extiende entre los ríos Lagarfljót y Jökulsá á Brú en el norte de Egilsstaðir.
Inaugurado en 2019, cerca del lago Urriðavatn, Vök Baths se ha convertido en un destino esencial para los visitantes y residentes de la zona.
Este spa flotante es el primero de su tipo en Islandia[23] y ofrece una experiencia única en aguas certificadamente potables.