Eduardo López del Plano (Caspe, 1840-Zaragoza, 1885) fue un pintor español.
[2] En la Exposición de Bellas Artes celebrada en Madrid en 1862 presentó Adán y Eva arrojados del Paraíso.
[2] En 1871 regaló a la reina María Victoria un trabajo artístico, por el que se le dio por el rey Amadeo un obsequio.
[2] Más tarde fue pensionado por la Diputación Provincial de Zaragoza, y obtuvo una segunda medalla en la Exposición leonesa de 1877.
[2] Fue caballero de la Orden de Carlos III[2] y entre sus discípulos se contó Antonio Montero Arbiza.