Eduardo Arozamena

En su primera etapa fue miembro fundamental del teatro principal, en donde llegó a convertirse en uno de los actores mejor pagados de su tiempo.

[cita requerida] A partir de los años 30, desarrolló nuevamente su carrera en el cine, dirigió y escribió un par de cintas y participó en películas como Drácula (1931), con producción estadounidense y en donde interpretaba a Van Helsing; Martín Garatuza (1935), Almas rebeldes (1937), Los de abajo (1940), El gendarme desconocido (1941), Así se quiere en Jalisco (1942), Flor silvestre (1943), Doña Bárbara (1943), La vida inútil de Pito Pérez (1944), Enamorada (1946), El muchacho alegre (1948), Río Escondido (1948), cinta por la que recibió una nominación al premio Ariel; Maclovia (1948), La malquerida (1949), La mujer que yo perdí (1949) y El suavecito (1950).

Eduardo Arozamena se casó alrededor de 1900 con la tiple Clemencia Sánchez Méndez, quien había enviudado y ya tenía un hijo, Eduardo.

Procrearon además otros cinco: Juan, Lupe, Luisa, Carmen y Amparo Arozamena Sánchez.

Se casó por segunda ocasión con la escritora Carmen Pasarón Arenzana, con quien procreó gemelos que nacieron el 2 de octubre de 1930: Eduardo y Carlos Arozamena Pasarón.