Su madre, Edelmira Robato y Turro, nació en Cuba, de origen asturiano.
Su marido la describió como una "persona dotada de todas las cualidades para hacerme dichoso".
Posteriormente, el infante contrajo matrimonio con Marta Esther Rocafort y Altuzarra.
Fue la única mujer que la Familia Real reconoció como esposa del príncipe.
No volvió a contraer matrimonio y jamás concedió ninguna entrevista.