Chambers brilló como gran promesa, ganando el oro en la carrera de 100 metros lisos en los Europeos Junior de 1995 y estableciendo un nuevo récord junior en el mismo evento de 1997.
Posteriormente volvería a ser investigado en octubre donde dio positivo por sustancias prohibidas.
[2] En los siguientes años, trató de dedicarse al fútbol americano y al rugby sin mucho éxito,[2] ya que firmó un contrato con los Hamburg Sea Devils de la NFL Europa[3] y se le ofreció otro contrato por parte de los Castleford Tigers de la Super League, el cual nunca se concretó.
En 2008 vuelve a la élite del atletismo con una medalla de plata en 60 metros lisos en el Campeonato Mundial de Atletismo en Pista Cubierta de 2008, pero el público le rechazó de manera general.
[2] Además, a pesar de ese éxito, le fue denegada la participación en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, dado que Gran Bretaña no permite a un atleta condenado por dopaje volver a participar nunca en sus equipos olímpicos.