Dux (visigodo)

[6]​ Por ello, esta se basó en el modelo existente, adaptando las divisiones administrativas y los distintos cargos militares y civiles romanos a la nueva realidad de la Galia e Hispania.[6]​ Generalmente se acepta que ya en esta época el dux provinciae ostentaba el mando militar y civil en la provincia,[6]​ aunque algunos historiadores sostienen que esto no ocurrió hasta las reformas emprendidas por Chindasvinto (642-653) y Recesvinto (653-672) y que, hasta entonces, los duces tan solo tenían funciones militares.En cualquier caso, no puede asegurarse que en los primeros años del reino visigodo existiera una clara distinción entre los cargos militares y los civiles.Por ello, era habitual que cuando el rey pretendía asegurar la sucesión en la persona de su hijo, le nombrara dux provinciae como primer paso para asociarle al trono.[2]​ Tan solo se tienen algunos datos sobre las funciones concretas que desempeñaba el dux como máxima autoridad civil, militar, judicial y fiscal en las provincias.En caso contrario, el obispo debía elevar sus conclusiones y las del juez superior al rey, quien decidía en última instancia.