Dulce de membrillo rubio de San Juan
[1] El color rubio claro, uniforme, con distintas tonalidades hacia el amarillo, naranja o castaño rojizo, son resultado del uso de las variedades de membrillo existentes en San Juan (Criollo y Champion), que poseen atributos distintivos de sabor, aroma y olor derivados de los factores agroecológicos de los valles en que son cultivados.Se genera debido a la alta heliofanía de San Juan, es decir, el tiempo en que el territorio y sus cultivos reciben radiación solar directa, con más de 300 días de sol por año.[2][3] A esto se suma un cuidado proceso de selección de frutos sanos, frescos, sin defectos por golpes o plagas y una elaboración a escala artesanal o empresarial, que evita la oxidación.Para la elaboración del dulce se utiliza pulpa de membrillo y azúcar, sin agregados.Tiene asimismo una granulometría tal que hace percibir las células pétreas.