Ducado de Molina y Soria
Beltrán Duguesclín, era un mercenario bretón, que puso su espada y sus huestes al servicio del Infante Enrique, en la guerra que este sostenía contra su hermano Pedro I de Castilla.En los campos de Montiel, Beltrán Duguesclín, llevó con engaños a Pedro I a la tienda de su hermano Enrique, con la excusa de que se reconciliasen y terminase la guerra que sostenían entre ambos, pero una vez allí los dos hermanos se enzarzaron en una sangrienta pelea, y Beltrán Duguesclín sujetó a Pedro I para que Enrique pudiera darle muerte.En ese momento fue cuando Beltrán Duguesclín dijo la famosa frase: Ni quito ni pongo rey, pero ayudo a mi señor.El infante Enrique fue proclamado rey de Castilla con el nombre de Enrique II, al que se le llamó el de las mercedes, por su generosidad con la nobleza a la que quiso atraerse para que se le reconociera como Rey.[2] «Este título cesó en 1375 por haberlo vendido su beneficiario al rey en 150.000 doblas».