Fue escrita por Russell T Davies, quien originalmente la había pensado para la sexta temporada, y dirigida por Dylan Holmes Williams.
El propio Davies y los críticos lo han comparado con la serie de antología Black Mirror.
Descubre que Homeworld ya ha sido consumido por las babosas, pero no le informa de esto a Lindy.
El Doctor se da cuenta de que las babosas fueron creadas y criadas dentro de Finetime por los puntos al adquirir conciencia propia, y que estos están llevando a los residentes a la muerte en orden alfabético.
[1] Desarrolló el concepto inicial en 2009 cuando el showrunner que le sustituiría, Steven Moffat, le pidió a Davies que regresara al programa después de su partida inicial y escribiera un episodio para el Undécimo Doctor (Matt Smith) y su compañera Amy Pond (Karen Gillan).
[2] Davies finalmente le propuso la idea del episodio a Moffat en abril de 2010 para la sexta temporada, pero fue descartado debido a las limitaciones presupuestarias que habrían requerido los potentes efectos visuales.
[3]Los títulos provisionales del episodio incluían "irl" (abreviatura utilizada en redes sociales que significa in real life o "en la vida real") y "Monsters, Monsters Everywhere".
[9][10]Brennan Klein, del medio Screen Rant, compara la premisa con los episodios "Fifteen Million Merits" (2011) y "Nosedive" (2016).
Millennium FX diseñó las criaturas babosas, que requirieron tres personas para operarlas durante el rodaje.
[20] El resto del elenco invitado incluye a Eilidh Loan, Aldous Ciokajlo Squire y Niamh Lynch, entre otros.
[27]Morgan Jeffery, en su crítica del episodio para Radio Times, afirmó que el episodio "parece una víctima de su propia ambición", y cree que, aunque tenía "muchas ideas", "se extiende demasiado" en el proceso.
El escritor de IGN, Robert Anderson, habló de manera similar sobre el episodio y opinó que habría sido mejor si Gatwa y Gibson hubieran tenido más tiempo en pantalla.
[10] Isobel Lewis del New York Times también comentó esto, explicando que un personaje se refiere a la tecnología de la TARDIS como "vudú", lo que ha sido utilizado como un insulto racial a lo largo de la historia.