Doña Macabra es una telenovela mexicana de 1963 producida por Ernesto Alonso y escrita por Hugo Argüelles especialmente para Amparo Rivelles y Ofelia Guilmáin.
Esta telenovela, primera que se grabó de humor negro, contaba la historia de dos ancianas, dos brujas malditas, Armida ("Doña Macabra) y Demetria, asediadas por unos ambiciosos parientes, unos buitres, que piensan que ellas guardan un tesoro en su casa.