Divicón
[2] Derrotó a un ejército romano mandado por Lucio Casio Longino cerca de Agen en el año 107 a. C.[2] Julio César, en su obra Comentarios a la guerra de las Galias, recuerda que sólo el cantón de Tigurino, en tiempo de sus antepasados, al salir del país, había dado muerte al cónsul Lucio Casio, y había hecho pasar a su ejército por debajo del yugo (libro I, 12.4-6).En venganza de aquello, César derrotó a este cantón el primero entre los helvecios, estando aun comandados por Divicón, según César cuenta en su libro, por lo que Divicón seguía siendo el jefe de su pueblo en el año 58 a. C. En efecto, en el capítulo 13 del libro I dice que los helvecios le enviaron embajadores, comandados por Divicón, «quien había sido comandante de los helvecios, en la guerra contra Casio».Así que no pasara de ese lugar donde estaban ellos, pues podría «hacerse un nombre» con el desastre del Pueblo Romano y la destrucción de su ejército.En el siguiente capítulo, 14, se contiene la respuesta de César, que básicamente le dijo que él tenía muy presente el recuerdo de aquel desastre y que el Pueblo romano no lo iba a olvidar, y aunque pudiera hacerlo, no podría ignorar las tropelías contra pueblos amigos de los romanos como los heduos y el intento de los helvecios de forzar su paso por la Provincia y el territorio de los alóbroges; no obstante, mantendría la paz con ellos si le entregaban rehenes, y reparaba el daño hecho a heduos y alóbroges.El ejército romano siguió a los helvecios a corta distancia y, al final, los derrotó en una rápida batalla que narra en el capítulo 21 y siguientes del Libro I de los Comentarios.