Dioses de los Reinos Olvidados

Otros seres planarios emparentados con los dioses también pueden conformar cultos y panteones, como los Primordiales o los Males Antiguos[3]​ El material en español de los Reinos corrió a cargo de varias editoriales, como Ediciones Zinco, Devir Iberia o la más reciente, Edge.

No todos los dioses del este grupo son adorados en todas partes, es común que en una región solo unas cuantas de estas fes sean predominantes, pero siempre es posible encontrar adoradores dispersos o no organizados de las demás.

Las razas de otros mundos que se establecieron en los Reinos llevaron con ellos a su propio panteón, como los enanos con los Morndinsamman.

El panteón faerûnense es adorado principalmente por humanos pero muchas otras razas también veneran a estos dioses.

Estos tres seres o entidades antiguas son poderosos primordiales alineados con el mal y la destrucción que aparecen en la mitología faerûnia.

En relato dice que después se sentaron en el Salón de los Cortesanos como deidades menores.

Algunos de estos cultos son breves pero otros pueden durar años, dependiendo del "sacerdote" que los lidere.

Básicamente este panteón consiste en Lolth, su gobernante, y el resto de miembros que han sido sometidos a la fuerza.

Corellon es el reconocido gobernante de los Seldarine, a veces es acompañado por su consorte, quien es identificada como Sehanine o Angharradh.

Por ejemplo, Rillifane puede aparecer como un enorme roble, Sashelas como una ola gigante marina o Aerdrie como una nube blanca.

[177]​[178]​[179]​ Los enanos, o el Pueblo Recio como son llamados en los Reinos, adoran a un panteón de deidades colectivamente conocido como Morndinsamman.

Tanto Laduguer como Duerra, los dioses duergar, todavía se consideran parte del panteón pero son miembros exiliados.

[182]​ Los gnomos, o el Pueblo Olvidado como es llamado en los Reinos, adoran a un panteón conocido como los Señores de las Colinas Doradas.

Se dice que las deidades gnomas nacieron como gemas de ricos minerales en ese lugar.

Por ello sus miembros están asociados a algún material, como Garl con oro, Baervan con esmeraldas, Callarduran con rubíes o Segojan con los diamantes.

A veces Yondalla, Sheela y Cyrrollalee son vistas como las tres caras de una misma diosa.

El panteón orco, conocido como la Tribu del que Observa, es tan malvado como la mayoría de sus adoradores.

Añádase a esta lista los dioses mulhorandinos Set y Sebek, que tienen influencia sobre seres escamosos.

[228]​ El panteón de los gigantes es conocido como los Ordning (en mayúscula) y está liderado por su progenitor, Annam.

Son criaturas de inmenso poder, emparentada con los dioses, pero no poseen sacerdocios ni conceden conjuros divinos.

[278]​ Todas estas razas poseían sus propios panteones individuales hasta la llegada de Maglubiyet, un cacique tiránico que aniquiló a sus miembros.

Por ejemplo, Tezca es el dios del sol y el fuego, y también de todo lo relacionado con sus ámbitos, por lo que es venerado en diferentes localidades como diferentes númenes del humo, lava, luciérnagas o las luces de los farolillos.

En estos climas exóticos han surgido dioses extraños y misteriosos e incluso algunos de ellos son directamente monstruosos.

Por lo tanto, es correcto pensar que si en Shou Lung tenemos un emperador y una corte con sus funcionarios, debe ocurrir lo mismo en el Imperio celestial.

Estos emisarios fueron los primeros emperadores de Shou Lung, y son conocidos en las leyenda como los Nueve Inmortales.

El pueblo shou invoca constantemente a sus Inmortales pero realmente esperan de ellos que les brinden buena suerte en todas sus empresas.

Como recompensa, el Celestial les ha otorgado la bendición de inmortalidad y poderes divinos limitados.

Generalmente se acepta que las deidades Nagikami y Namikami fueron los responsables de estas originales creaciones.

De estos dioses surgieron también las numerosas deidades y espíritus divinos ahora adorados en Kozakura.

Los azuposi son una raza de humanos que viven en la Cuenca del Pasocada, a medio camino entre Maztica y Anchorome.