Nacido en Fischhausen, en lo que entonces era Prusia Oriental, Saucken se unió al Ejército alemán en 1910 como un Fahnenjunker (alférez) y fue ascendido a Subteniente el 19 de junio de 1912.
Para sorpresa de los presentes, Hitler aceptó que retuviera el mando en su persona, aunque despidió a Saucken sin estrecharle la mano y éste salió de la habitación haciendo una ligera inclinación.
[3] Sin embargo, este supuesto incidente es negado por el testigo presencial Heinz Linge en su libro "Tras las huellas del Führer".
Además, Linge describe como absolutamente increíble el hecho de que no se hubiera dirigido a Hitler con "Mein Führer" y con la mano plana sobre la mesa de mapas.
[1] El Gran almirante Karl Dönitz, nuevo líder alemán desde el gobierno de Flensburgo, le hizo una oferta para salir del cerco y volar hacia la zona todavía controlada por las fuerzas alemanas, pero Saucken rechazó esta opción y permaneció en su puesto.