Diamante de sangre (película)

El título hace referencia a los diamantes de guerra, piedras preciosas que se encuentran dentro de zonas en guerra y que se venden para financiar dichos conflictos armados.

Solomon Vandy (Djimon Hounsou) es un pescador que vive junto a su esposa y su hijo Dia (Kagiso Kuypers).

Una mañana, Vandy descubre un enorme diamante rosa en la orilla del río y lo entierra en una zona de tierra blanda.

Archer llega a Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, donde se reúne con sus antiguos camaradas militares, entre ellos el coronel Coetzee (Arnold Vosloo), un afrikáner anteriormente miembro de Batallón de los Búfalos de la era del apartheid, ahora free lance con una empresa militar privada que proporciona armas a los rebeldes mientras opera como mercenario para los gobiernos locales.

Mientras tanto, Dia es entrenado por los insurgentes del FRU y el capitán Poison, que ha logrado salir de prisión, como niño soldado.

Archer y Vandy se ocultan juntos, mientras el FRU celebra la caída en sus manos de Freetown.

Vandy se reencuentra con su esposa e hija en un campamento de refugiados, pero descubre con impotencia que Dia ha sido reclutado por el FRU.

Ambos intentan llegar hasta el campamento del capitán Poison para que Vandy se reúna con su hijo, para su desgracia, son localizados y apresados por los rebeldes.

Este continúa excavando hasta localizar el fastuoso diamante; en ese momento, aparece Dia que vuelve a encañonar a su padre, pero este consigue hacerle entrar en razón convenciéndole de su inocencia, derrumbándose el niño en sus brazos.

Vandy le entrega el diamante a Archer, sin embargo, este recibe una herida mortal.