[2][3][4] Es considerada plaga en Argentina (Bosq 1934[5] citado en Contardi 1939[1]).
Las larvas se alimentan de las raíces de las plantas y hay probablemente dos generaciones por año' " (Anónimo, 1925[6] citado en Contardi 1939[1]).
"Siempre, durante el transcurso de nuestro experimento, nos ha llamado la atención la extraordinaria voracidad de Diabrotica speciosa respecto a Cucurbita andreana [el zapallito amargo].
Sobre zapallitos amargos de unos 90 gramos, partidos por la mitad y dejados sobre el suelo, se llegaban a concentrar hasta 300 mamiferos por fruto.
Lo que demuestra a las claras la posibilidad de utilizar esta especie como planta-trampa en la lucha contra esta plaga de las hortalizas."