La diócesis de Tulsa (en latín: Dioecesis Tulsensis y en inglés: Roman Catholic Diocese of Tulsa) es una circunscripción eclesiástica de la Iglesia católica en Estados Unidos.
La diócesis tiene 68 394 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en 31 condados del estado de Oklahoma: Adair, Atoka, Bryan, Cherokee, Choctaw, Coal, Craig, Creek, Delaware, Haskell, Hughes, Latimer, Le Flore, McCurtain, McIntosh, Mayes, Muskogee, Nowata, Okfuskee, Okmulgee, Osage, Ottawa, Pawnee, Payne, Pittsburg, Pushmataha, Rogers, Sequoyah, Tulsa, Wagoner y Washington.
La sede de la diócesis se encuentra en la ciudad de Tulsa, en donde se halla la Catedral de la Sagrada Familia.
La diócesis fue erigida el 13 de diciembre de 1972 con la bula De sanctae Christi del papa Pablo VI, tras la división de la diócesis de Oklahoma City-Tulsa, que también dio lugar a la arquidiócesis de Oklahoma City.
[1] Según el Anuario Pontificio 2021 la diócesis tenía a fines de 2020 un total de 62 174 fieles bautizados.