Diócesis de Carcasona y Narbona

En el territorio diocesano se encuentran 2 basílicas menores: Notre-Dame de Marceille, en Limoux, y San Pablo, en Narbona.

[nota 1]​ El primer obispo históricamente documentado fue Hilario, mencionado en algunas cartas pontificias entre 417 y 422.

Narbona fue la sede metropolitana de la Galia Narbonense I y se atestigua una provincia eclesiástica desde el siglo VI.

Sin embargo, debido a los acontecimientos políticos y militares que involucraron al Languedoc con la caída del Imperio romano, sólo en teoría la provincia eclesiástica coincidió con Narbonense I.

Cuando los francos arrebataron Septimania a los árabes (759), la metrópolis original, formada por las sedes de Elna, Carcasona, Béziers, DLodève, Agda, Maguelone, Nimes, Toulouse y Uzès.

La catedral carolingia, dedicada a dos santos de origen español, Justo y Pastor, fue reconstruida por el obispo san Teodardo en la segunda mitad del siglo IX y completamente reconstruida a partir del siglo XIII.

También en 1317, para combatir mejor la herejía cátara, Toulouse fue elevada al rango de arquidiócesis metropolitana y se erigieron en su territorio 6 diócesis sufragáneas.

Finalmente, en 1694 la nueva diócesis de Alès entró también en la provincia eclesiástica de Narbona, que, al estallar la Revolución francesa, incluía 11 sufragáneas: Elna, Carcasona, Béziers, Lodève, Agda, Montpellier (la antigua Maguelone), Nimes, Alet, Alès, Saint-Pons-de-Thomières y Uzès.

A finales del siglo XI la iglesia de los Santos Nazario y Celso fue reconstruida en Carcasona y el papa Urbano II, que fue a Carcasona para predicar la cruzada, bendijo el inicio de las obras.

Excatedral basílica de los Santos Nazario y Celso, en Carcasona
Excatedral de los Santos Justo y Pastor, en Narbona
Excatedral y abadía de los Santos Pedro y Pablo, en Saint-Papoul
Excatedral San Martín, en Limoux
Ruinas de la excatedral de Nuestra Señora, en Alet-les-Bains
Palacio de los arzobispos de Narbona
Mapa de la arquidiócesis de Narbona en el siglo XVIII