La canción trata sobre el amor, los desequilibrios emocionales y la constante búsqueda de significados racionales dentro del caos.
[1] abordando el tema de la fragilidad humana y la soledad.
[2] Es, por tanto, una balada romántica, que se sustenta sobre el sonido de la guitarra acústica.
El propio Vega versionó su canción junto a Enrique Urquijo para el álbum de Enrique Urquijo y Los Problemas Desde que no nos vemos.
en el disco homenaje a Antonio Vega Ese chico triste y solitario (1993) y posteriormente lo sería por Iván Ferreiro en El alpinista de los sueños.