Derivación sanitaria

La derivación es la remisión de un paciente, por parte del médico tratante, a otro profesional sanitario, el cual revisa la historia médica y explora al paciente para ofrecerle una atención complementaria tanto para su diagnóstico como para su tratamiento o rehabilitación.

Distinguimos los siguientes tipos: La derivación es un procedimiento que implica a tres partes distintas: el médico de cabecera, el paciente y el especialista.

En los países con médicos generales/de familia con función de filtro (gatekeepers) para la atención primaria, la derivación del paciente desde primaria a especializada abre las puertas para el paso del primer al segundo nivel asistencial.

Así, a través del filtro, los recursos tecnológicos se reservan para quienes probablemente los necesitan, y se evita su uso innecesario por quienes no los necesitan (se evitan el despilfarro económico y el daño a la salud que provoca el uso indebido de los recursos: prevención cuaternaria).

[5]​ Las expectativas de los pacientes, médicos generales y especialistas son distinta en relación con la derivación.