La lituana es una sociedad preocupada por la educación, que es obligatoria hasta los 16 años de edad.
Las minorías más importantes son los polacos (6,74%), rusos (6,31%) y bielorrusos (1,23%), quedando el 2,27% restante de otros grupos étnicos.
Esta concentración tan elevada permite al partido propolaco, Lietuvos lenkų rinkimų akcija (Acción Electoral de los Polacos Lituanos), un partido cuya base electoral es una minoría étnica, tener gran influencia política.
El partido logró entre 1 y 2 escaños en las elecciones de finales del siglo XX y principios del XXI, aunque sus resultados electorales son mejores en las elecciones locales, llegando a controlar varios ayuntamientos.
Los rusos son la segunda minoría en importancia, pero pese a ser prácticamente igual de numerosos que los polacos, están mucho más dispersos geográficamente, lo que no les permite tener un partido político influyente.
No obstante, a la población rusa que se quedó en el país se le concedió automáticamente la nacionalidad lituana y adquirió los mismos derechos que los lituanos étnicos, pudiendo tener así mismo acceso a enseñanza en ruso.
Los hebreos lituanos fueron llamados Litvaks y poseían fuertes señas de identidad.
En Lituania existe la posibilidad de seguir una educación en los idiomas minoritarios no oficiales.
Cerca del 70% de los graduados en secundaria continúa sus estudios en la universidad o escuelas profesionales.