Se considera el tipo de granate más valioso para este uso.
[1] Los primeros ejemplares fueron encontrados hacia 1853 por un niño, como cantos rodados, entre las gravas del río Bobrovka, en Nizhnii Tagil, región de los Urales, Rusia.
Su dureza y resistencia química hace que también se encuentre como cantos rodados en las llamadas gravas gemíferas.
[2] El granate demantoide tiene una dispersión de 0,057 superior a la del diamante.
[4] Em México aparece demantoide en el Cerro De La Concordia, Tatatila, Veracruz.